¡Vayan!
28 noviembre, 2020El temor a la muerte
1 diciembre, 2020Interpretando correctamente la Escritura
Nota del editor: Este es el primer capítulo en la serie de artículos de Tabletalk Magazine: ¿Qué es lo que realmente dice ese versículo?
De vez en cuando, me preguntan: «Si te encontraras en una isla desierta, y solo pudieras tener unos cuantos libros contigo, ¿cuáles quisieras tener?». A menudo respondo de manera similar a como el Dr. R.C. Sproul solía responder, diciendo que querría un libro sobre cómo construir un barco y un libro sobre los animales y plantas que son comestibles en una isla desierta. Mi siguiente respuesta a menudo sorprende a la gente. Les digo que me gustaría tener comentarios bíblicos. Si estuviera realmente en una isla desierta, lo que más me consolaría y alentaría, lo que ocuparía mejor mi tiempo y lo que me ayudaría más que nada a amar y glorificar a Dios y confiar en Su voluntad soberana sería el estudio a fondo de Su sagrada Palabra. Por el poder del Espíritu Santo, Dios nos habla a través de las Escrituras, y si los cristianos quieren escuchar a Dios hablarles, todo lo que tienen que hacer es leer la Biblia. Martín Lutero declaró: «La Biblia está viva, me habla; tiene pies, me persigue; tiene manos, me sujeta». La Biblia es nuestra única regla infalible de fe y conducta. Los comentarios son únicos porque nos ayudan a entender e interpretar lo que la Biblia en realidad dice, no lo que queremos que diga; e igualmente importante, nos ayudan a conocer lo que la Biblia no dice. Como la mayoría de los pastores en los Estados Unidos, tengo muchos libros, y muchos de mis libros están en los estantes de mi oficina en la iglesia. Sin embargo, mis comentarios, mis más preciados compañeros están en los estantes de mi oficina en la casa. Por cierto, creo que una de las mayores necesidades de la Iglesia y sus pastores en todo el mundo —particularmente en África y América Latina— es disponer de Biblias de estudio y comentarios reformados confiables.
No solo uso comentarios, ni simplemente los leo, más bien los devoro y me sumerjo en ellos, no solo por mi propio bien sino por el de mi esposa y nuestros hijos, así como por el de la novia de Cristo. La Biblia es un libro sagrado, y es el único libro verdaderamente sagrado porque es el único libro inspirado por el único y verdadero Dios, y debe ser interpretado a la luz del libro único que es. A lo largo de la historia, muchos han leído e interpretado la Biblia sin tener en cuenta su singularidad, y las consecuencias son claramente devastadoras. Para manejar con precisión la Palabra de Dios, necesitamos aprender a interpretar correctamente la Palabra de Dios, y para interpretar correctamente la Palabra de Dios, necesitamos estudiar cada versículo a la luz de toda la Escritura, usando comentarios y libros confiables sobre cómo interpretarla para que no sigamos creyendo y enseñando perspectivas distorsionadas de la Escritura de acuerdo con nuestras propias presuposiciones y nuestros caprichos, sino de acuerdo con todo el consejo de Dios.