Una introducción a las duras declaraciones de Jesús
11 abril, 2019Oculto a los sabios
18 abril, 2019Y los violentos lo conquistan por la fuerza
Nota del editor: Este es el tercer capítulo en la serie «Las duras declaraciones de Jesús», publicada por Tabletalk Magazine.
Jesús dijo: «Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo conquistan por la fuerza» (Mt 11:12). Aquí, dos interrogantes han dejado a los lectores rascándose la cabeza: primero, ¿qué quiere decir que el reino está sufriendo violencia? Y segundo, ¿quiénes son los que conquistan el reino por la fuerza? Para ir aclarando un poco este asunto, comencemos con la segunda pregunta para luego regresar a la primera.
Así como el reino enfrentó hostilidad en aquel entonces, también lo hace ahora.
¿Quiénes son «los violentos» que «conquistan [el reino] por la fuerza»? La palabra traducida como«los violentos» siempre tiene una connotación negativa. Por lo tanto, no puede describir una acción positiva, como en la traducción «hombres ansiosos se esfuerzan por entrar en él» (J.B. Phillips). Debe referirse a aquellos que se opusieron al reino. Esto se hace aún más obvio cuando reconocemos que la palabra traducida como «conquistan» (o «arrebatan») casi siempre implica malas intenciones. Las personas malvadas que encajan en esta descripción incluyen a Herodes Antipas, quien encarceló a Juan el Bautista (Mt 11:2), y los líderes judíos que se opusieron al ministerio de Jesús (9:34; 12:22-24).
¿Qué quiere decir que el reino está “sufriendo violencia”? El verbo griego usado aquí puede traducirse correctamente de dos maneras: «sufriendo violencia» o «avanzando con fuerza». Ambas traducciones son admisibles. La primera opción considera que el reino está bajo ataque de las fuerzas de las tinieblas (Herodes Antipas, líderes judíos, etc.). La opción dos proyecta una imagen del reino de Dios como avanzando poderosamente contra esa misma oposición. Si bien cada una destaca un elemento verdadero del reino de los cielos, la opción uno es más convincente. Porque si «los violentos conquistan [el reino] por la fuerza», entonces tendría más sentido ver el reino como «sufriendo violencia» a manos de «los violentos». En ambas cláusulas de Mateo 11:12, el reino de Dios es el objeto directo de la hostilidad incrédula.
Así como el reino enfrentó hostilidad en aquel entonces, también lo hace ahora. Pero los creyentes pueden descansar confiadamente en el triunfo de Dios sobre el mal, el pecado y la muerte misma a través del Señor Jesucristo. Cualquiera que sea la oposición que el reino y sus súbditos puedan enfrentar, la declaración de Job al Señor sigue siendo cierta: «Yo sé que Tú puedes hacer todas las cosas, y que ningún propósito tuyo puede ser estorbado» (Job 42:2).