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Transcripción
Hemos llegado al final de nuestra breve serie de temas relacionados con el fin de los tiempos y ciertamente estaría incompleta si omitiera al menos un pequeño o simple resumen de las diversas posiciones escatológicas que compiten entre sí por aceptación en nuestros días, que generalmente se articulan en términos de cómo uno entiende la enseñanza del Nuevo Testamento sobre el milenio. Veremos el texto bíblico sobre eso en un momento, pero escuchas las diversas escuelas de pensamiento que describen una especie de resumen teológico donde decimos que alguien es premilenialista o premilenial; otro es post milenial; alguien más es amilenial; otro es dispensacional o un tipo particular de premilenial y demás.
Estas diferentes posiciones teológicas y escatológicas se definen en términos de cómo entienden el milenio. Pero estos asuntos no son solo sobre el milenio. Representan toda una gama de posturas diferentes de los asuntos escatológicos además de cómo uno entiende el asunto milenario. Pero veamos el texto que ha generado tanta discusión sobre el milenio. Lo encontramos en el libro de Apocalipsis en el capítulo 20, empezando en el versículo 1. Dice así: «Vi entonces a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo y una gran cadena en su mano. El ángel prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años».
Así que aquí está la primera referencia al período de mil años y tiene que ver con la atadura o encadenamiento de Satanás, donde Satanás es mantenido en cautiverio, según la representación aquí en Apocalipsis, por un período de mil años. «Lo arrojó al abismo, y lo encerró y puso un sello sobre él para que no engañara más a las naciones, hasta que se cumplieran los mil años. Después de esto debe ser desatado por un poco de tiempo». Entonces, ¿entiendes la imagen en la cronología que se plantea? Satanás está atado, está cautivo, está en el abismo sin fondo durante mil años y al final de esos mil años va a ser liberado por un poco de tiempo.
Luego leemos: «También vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que se les concedió autoridad para juzgar. Y vi las almas de los que habían sido decapitados por causa del testimonio de Jesús y de la palabra de Dios, y a los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, ni habían recibido la marca sobre su frente ni sobre su mano. Volvieron a la vida y reinaron con Cristo por mil años. Esta es la primera resurrección. Los demás muertos no volvieron a la vida hasta que se cumplieron los mil años. Bienaventurado y santo es el que tiene parte en la primera resurrección. La muerte segunda no tiene poder sobre estos sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con Él por mil años. Cuando los mil años se cumplan, Satanás será soltado de su prisión, y saldrá a engañar a las naciones que están en los cuatro extremos de la tierra, a Gog y a Magog, a fin de reunirlas para la batalla. El número de ellas es como la arena del mar. Y subieron sobre la anchura de la tierra, rodearon el campamento de los santos y la ciudad amada. Pero descendió fuego del cielo y los devoró. Y el diablo que los engañaba fue arrojado al lago de fuego y azufre, donde también están la bestia y el falso profeta. Y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos. Vi un gran trono blanco» y demás y sigue la descripción del juicio.
Así que aquí escuchamos sobre un período intermedio de la historia, de mil años, donde Satanás está atado y Cristo está reinando junto con Sus santos, luego Satanás es desatado quien luego, en ese momento, librará una guerra contra Cristo y contra Sus santos y por supuesto el resultado de esa guerra no está en duda ya que Cristo finalmente triunfará y junto con los santos reinará para siempre. Ahora, ¿cómo es este período de mil años? Y este es el único lugar donde encontramos alguna referencia específica a él en la Biblia, pero, por supuesto, solo tienes que encontrarlo una vez para tomarlo en serio.
Las diferentes escuelas de escatología, ¿cómo ven esto? Bueno, empecemos con la llamada posición amilenial. La palabra amilenial significa literalmente «no milenio». Alguien que es amoral no es moral y la «a» representa una negación y esa posición asume la idea de que el milenio que se describe aquí no es un período literal de mil años, sino que está hablando en lenguaje simbólico sobre la historia de la iglesia. La posición amilenial cree que la era de la iglesia es la era del reino de Dios y que el reino de Dios empezó con la primera aparición de Cristo. Cuando Él vino, cumplió las profecías cercanas de Juan el Bautista, quien dijo que el reino de Dios estaba cerca, en términos de cercanía radical. Cuando Jesús apareció en escena, dijo que el reino de Dios está en medio de ustedes. Él dijo: «Yo por el dedo de Dios echo fuera los demonios, entonces el reino de Dios ha llegado a ustedes».
De modo que en la ascensión de Cristo, Él asciende a la diestra de Dios. Él va a Su coronación donde es coronado como Rey de reyes y Señor de señores. Entonces, la posición amilenial se basa en la convicción de que el reino de Dios no es algo que está completamente ahí afuera en algún lugar en el futuro, sino que ya ha empezado. Ha iniciado. Todavía espera su consumación final, pero las profecías del Antiguo Testamento que se refieren al futuro de Israel y la redención completa y final de Israel se refieren, según la posición amilenial, a la iglesia. La iglesia es el reino de Dios. La iglesia cumple las profecías del Antiguo Testamento. La iglesia incluye tanto a gentiles como a judíos.
La posición amilenial todavía deja espacio para un futuro trato de Dios con el Israel étnico, con el pueblo judío, pero no en una agenda separada, un programa separado donde Dios tiene un plan redentor para los judíos y otro plan redentor para los gentiles, sino que toda la profecía en la Biblia se refiere a la iglesia y al reino de Cristo que incluirá tanto a judíos como a gentiles. Además, la posición amilenial cree que la comunidad cristiana, tal como se manifiesta el reino, tendrá una influencia positiva continua en la cultura, que el impacto de la iglesia en el mundo será traer bendición y mejorar la condición humana y la situación humana. A lo largo de la historia habrá una influencia positiva continua de Cristo y Su iglesia en el mundo. Juan Calvino, por ejemplo, enseñó que la tarea suprema de la iglesia entre su inicio y su consumación al final de los tiempos es dar testimonio del reino invisible de Cristo. Dijo que es tarea de la iglesia hacer visible el reino invisible.
Ustedes recordarán que cuando Jesús dejó este planeta, la última pregunta que le hicieron Sus discípulos fue la pregunta: «Señor, ¿restaurarás ahora el reino a Israel?». ¿Y qué dijo Jesús? Él no dijo: «¿Cuántas veces tengo que decirte que no va a haber un reino para Israel?». No. Él dijo: «Les digo que esos tiempos están en las manos de Mi Padre». Luego continúa diciendo: «Pero ustedes serán Mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra». Lo que la posición amilenial diría es que creen que es tarea de la iglesia ser testigos del reino invisible que ya existe. El Señor Jesucristo reina ahora mismo. Él es el Señor de la tierra. Él es el Rey de reyes y nosotros estamos en la era del reino, pero el reino no ha sido consumado.
Además, el amilenialismo busca una futura apostasía hacia el final de los tiempos, donde la iglesia se corromperá, será tan corrupta que terminará en un estado radical de apostasía, que no se ha visto en ese grado incluso hasta este momento en la historia de la iglesia. Esta es una de las razones por las que muchas personas creen que estamos entrando en las últimas horas de la historia, debido a la apostasía generalizada de la iglesia cristiana que empezó con la llegada del liberalismo del siglo XIX básicamente con su agenda de incredulidad. En todo caso, dirían que esta apostasía resultará entonces en un período de gran sufrimiento para aquellos que son fieles a Cristo y este período de sufrimiento será llamado lo que ellos entienden que es la tribulación, en la que el anticristo se manifestará al final de los tiempos y los santos tendrán que soportar un gran sufrimiento durante este período de la obra del anticristo quien perseguirá al pueblo de Dios.
La iglesia no escapará de este período de tribulación a través de algún tipo de rapto de pretribulación. Luego, al final de este período, Cristo regresará y triunfará sobre las fuerzas del mal y terminará Su obra de redención que incluye la renovación de toda la creación con los nuevos cielos y la nueva tierra. Pero todo esto está ocurriendo durante un período indefinido de tiempo, que no será literalmente mil años, porque la posición amilenial se basa en la suposición de que el milenio realmente empezó en el Nuevo Testamento con el triunfo de Cristo en Su cruz, resurrección y ascensión. Entonces, el reinado de mil años es un período indefinido desde el momento en que Cristo es inaugurado como rey hasta cualquier momento, en el futuro, que Él regrese, sean mil años, dos mil años, tres mil años o cuatro mil años literalmente, el milenio es simplemente una representación simbólica de este paréntesis o este período intermedio.
Por otro lado, tenemos la forma dispensacional de escatología premilenial en la que el punto de vista dispensacional es que ahora mismo no estamos en la era del reino, sino que estamos en la era de la iglesia y la era de la iglesia representa un paréntesis entre el período del antiguo pacto y la venida del reino. Para el dispensacionalista, la venida del reino es completamente futura. Este es uno de los aspectos que creó tanta controversia sobre la comprensión, por ejemplo, de la enseñanza de Jesús en el Sermón del monte. Algunos, si no la mayoría de los dispensacionalistas clásicos creen que la ética enseñada por Jesús en el Sermón del monte no tiene relevancia para la iglesia contemporánea, sino que es una ética del reino que solo se implementará al final del tiempo después de que Cristo regrese, cuando Él establezca Su reino.
La posición premilenial también, como ya indiqué, ve dos agendas distintas en la historia redentora: una para Israel y otra para la iglesia. Así que todas las profecías del Antiguo Testamento y muchas de las profecías del Nuevo Testamento que hablan, por ejemplo, de la aparición del anticristo, el hombre de pecado que aparece en el templo. Los dispensacionalistas buscan un futuro del pueblo de Israel después de que la iglesia esté fuera del mundo, donde el templo será reconstruido, los sacrificios serán reinstituidos y Cristo, Cristo vendrá y convertirá a los judíos para sí. Pero habrá un plan redentor para los judíos que es distinto del plan redentor de la iglesia, y la iglesia no es el nuevo Israel. La iglesia es una institución diferente de Israel. Muchas de las profecías del Antiguo Testamento que anticipan la futura redención de Israel, de acuerdo con el dispensacionalismo, no se cumplen de ninguna manera en la iglesia del Nuevo Testamento, sino que aún esperan su cumplimiento final mientras Dios sigue obrando entre los judíos. Como dije, el dispensacionalismo anticipa este rapto pretribulacional y al final habrá un reinado de mil años en el momento en que Cristo regrese, y seguido después de esos mil años, la victoria sobre Satanás, pero Satanás no habrá sido atado hasta que llegue ese reinado de mil años.
Ahora, la posición postmilenial, que difiere de estas otras, cree que la iglesia nuevamente es Israel. Comparten esa idea con la posición amilenial, pero que el reino de Dios es un reino de redención espiritual y no un programa de transformación terrenal o política. Sin embargo, la posición postmilenial de todas las posiciones es la más optimista con respecto a la influencia de la iglesia en la sociedad, que la influencia de la iglesia en la sociedad será transformadora y a medida que la Gran Comisión tenga éxito, habrá una gran bendición en el mundo como resultado de la proclamación del evangelio y el impacto de la iglesia y después de mil años, mil años literales de esto, Jesús regresará al final del período de mil años con el juicio final.
Para la mayoría de los postmilenialistas el reinado de mil años de Cristo aún no ha empezado, pero se iniciará y se manifestará una gran victoria de la influencia del cristianismo en el mundo… para que el poder del evangelio y el poder de la iglesia sean cada vez más y más y más grandes en vez de más y más y más pequeños. De modo que, algunas personas que tienen diversas posturas postmileniales prácticamente han anticipado un reino de Dios en la tierra en un período de tiempo posterior y significativo en el que estos eventos ocurrirán.
Ahora, con respecto al premilenialismo histórico, y hemos hecho una distinción entre el premilenialismo y el premilenialismo dispensacional, porque dentro de las teorías escatológicas, existe esta diferencia. Hay una doctrina clásica premilenial que difiere en ciertos puntos del dispensacionalismo. El dispensacionalismo como movimiento empezó en el siglo XIX, aunque afirma estar simplemente recuperando la verdadera escatología bíblica y la escatología de la iglesia primitiva. Pero a lo largo de la historia siempre ha habido quienes sostuvieron que Cristo regresaría antes del milenio y se establecería un reino por mil años después de lo cual habría la gran tribulación y la batalla final. En esta postura, la postura histórica premilenial, la iglesia de la era del Nuevo Testamento es la fase inicial del reino de Cristo como había sido profetizado en el Antiguo Testamento.
En segundo lugar, que la iglesia del Nuevo Testamento ganará victorias ocasionales en la historia, pero finalmente fracasará en su misión, perderá influencia y se corromperá hasta el punto de la apostasía a medida que la maldad y la corrupción en todo el mundo aumentan al final de la era de la iglesia. Entonces la iglesia pasará por un mundo, un futuro tiempo mundial sin precedentes de tribulación y aflicción. Esto, por supuesto, se conoce como el período de la gran tribulación. Eso marcará el final de la historia contemporánea tal como la conocemos. Luego, después de la tribulación, Cristo regresará para arrebatar a Su iglesia, resucitar a los santos difuntos y llevar a cabo el juicio de los justos, todo en un abrir y cerrar de ojos. Entonces Cristo descenderá a la tierra con Sus santos glorificados, peleará la batalla de Armagedón, atará a Satanás, establecerá un reino político mundial que será administrado personalmente por Jesús durante mil años y Su cuartel general, por supuesto, estará en Jerusalén.
Luego, al final de este reinado milenario, Satanás será desatado y ocurrirá otra rebelión masiva contra el reino y contra Cristo. Entonces Dios intervendrá en juicio ardiente para rescatar a Cristo y a los santos y luego ocurrirá la resurrección final y el juicio final y esto dará pie a que el orden eterno de la historia de inicio. De modo que, estos diferentes puntos de vista son, como ven, una descripción resumida en cuanto a su relación con este período de mil años. Una vez más, para recapitular, la posición amilenial es que el milenio no es un reinado literal de mil años.
Las otras tres posiciones tienen un reinado literal de mil años. Existe el reinado de mil años del premilenialismo histórico que ocurre, como acabamos de leer, en un punto futuro en el que Cristo reinará durante mil años en la tierra. Satanás será atado; luego será liberado durante un tiempo; y se da entonces la batalla de Armagedón. El punto de vista postmilenial ve un período de mil años de gran prosperidad para la iglesia que aún no ha llegado y cuando llegue, Cristo reinará a través de ese período de mil años de gran beneficio para todo el mundo y luego de eso habrá esta tribulación y el anticristo y todo este tipo de eventos.
Entonces, creo que tienen una idea al respecto y del lugar en el que están los preteristas obviamente, es que los preteristas totales no creen en un milenio, porque ellos dicen que ya ha ocurrido. Los preteristas parciales tienden, pero no todos, tienden a caer en el campo de la posición postmilenial, o la posición amilenial, pero la mayoría de ellos son postmilenialistas y todavía ven profecías futuras por cumplir, pero tienen una postura optimista de la influencia de la iglesia en la historia.
Ahora, la razón por la que existen estas posiciones que compiten entre sí, la amilenial, postmilenial, dispensacional, premilenial histórico, preterista y todo lo demás, es porque es muy difícil conocer con precisión y certeza las referencias exactas de profecías futuras. Es por eso que las mentes más grandes de la iglesia continúan examinando estas profecías. No tenemos el beneficio de ver en retrospectiva, que sería 20/20. Por eso queremos estar siempre vigilantes y siempre atentos, observando el curso de la historia mientras tomamos en serio las profecías futuras de las Sagradas Escrituras.