Las señales del falso maestro
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28 junio, 2022La necesidad de silenciar a los falsos maestros
Porque hay muchos rebeldes, habladores vanos y engañadores, especialmente los de la circuncisión, a quienes es preciso tapar la boca. Tito 1:10-11a
La necesidad de que los ancianos se mantengan firmes en la doctrina apostólica es, sin duda, un requisito permanente para el oficio, y esta necesidad es particularmente fuerte cuando surgen falsos maestros que amenazan la paz y pureza de la Iglesia. Este fue el caso en la Creta del primer siglo, donde sus iglesias jóvenes necesitaban desesperadamente hombres piadosos y con conocimiento bíblico para frenar la marea de error que empezaba a crecer.
Esto lo sabemos por Tito 1:10-11, donde Pablo menciona la presencia de «rebeldes, habladores vanos y engañadores» como una de las razones para nombrar a pastores y maestros con fundamento teológico (v. 9). Es difícil identificar con precisión los credos erróneos que circulaban en Creta, pero al igual que en el caso de las cartas a Timoteo, hay algunas pistas sobre las falsedades que se estaban enseñando allí. Al parecer, esas falsas enseñanzas tenían un matiz especialmente judío, porque el apóstol nombra a «los de la circuncisión» como los principales responsables de esta agitación (v. 10). A diferencia de la situación que Pablo abordó en su carta a los gálatas (Gá 6:12-13), esto no significa necesariamente que quisieran imponer la circuncisión a los creyentes cretenses (de hecho, la mayoría de los comentaristas cree que la práctica de la circuncisión en sí no era un problema). Pero está claro que los maestros que causaban dificultades en Creta eran cristianos judíos o gentiles embelesados con ciertos «mitos judíos» (Tit 1:14).
Como suele ocurrir con los falsos maestros, los de Creta estaban motivados por el ansia de dinero, no por la gloria de Dios, «enseñando, por ganancias deshonestas, cosas que no deben» (v. 11). Los ciudadanos de Creta eran conocidos en el mundo antiguo por su avaricia, por lo que los predicadores del error eran culpables de absorber la moral cretense, en lugar de transformar sus vidas por medio de la renovación de sus mentes según la doctrina apostólica (Ro 12:1–2).
La presencia de «maestros» que se rebelan contra la Palabra de Dios es la razón por la cual nuestro Señor ha ordenado ancianos para proveer corrección y guía a la Iglesia. Es por eso que Juan Calvino comenta que los ancianos deben «estar alertas, para no permitir mediante su silencio que las doctrinas dañinas y perjudiciales avancen gradualmente, ni que los hombres perversos tengan oportunidad de propagarlas».
Coram Deo: vivir delante del rostro de Dios
En la actualidad, permanece cierto que el dinero a menudo sigue a una enseñanza errónea y, por desgracia, los pecadores suelen estar más dispuestos a invertir sus ingresos en personas e instituciones que diluyen el evangelio o enseñan una clara perversión del mismo. Los que estamos comprometidos con el evangelio bíblico debemos estar aún más dispuestos a apoyar a las personas, instituciones e iglesias que proclaman las Escrituras con fidelidad.
Para estudiar más a fondo
Proverbios 14:6 |
Mateo 26:14-16 |
1 Timoteo 6:10 |
2 Juan 7-8 |