La Catedral de St. Pierre

¿Sabías que aún puedes visitar la iglesia de Ginebra (Suiza) en la que predicó Juan Calvino? En este episodio de 5 Minutos en la Historia de la Iglesia, Stephen Nichols explora cómo habría sido el culto en St. Pierre en tiempos de Calvino.

Transcripción

Bienvenidos a 5 Minutos en la Historia de la Iglesia, un podcast de los Ministerios Ligonier con Steve Nichols, donde viajamos en el tiempo para observar eventos, personajes y lugares que han dado forma a la historia del cristianismo.

En este episodio estaremos hablando de un lugar, un edificio muy especial, una catedral donde predicaba el famoso reformador Juan Calvino. Se trata de la Catedral de San Pedro, conocida como la Catedral de St. Pierre.

Como todos saben, en Roma se encuentra la famosa Basílica de San Pedro, el hogar espiritual del papa. Sin embargo, también existe esta otra prominente catedral de San Pedro, que se encuentra en Ginebra, Suiza. Y como les decía, esta catedral fue la iglesia adoptiva del reformador Juan Calvino. Y dado que Ginebra es una ciudad de habla francesa, la llamaremos St. Pierre.

Ginebra estuvo bajo el dominio romano desde al menos el año 58 a. C. Julio César veía a Ginebra como una ciudad principal, y allí había un asentamiento romano. Para el siglo IV, se construyó una iglesia en Ginebra, y esta iglesia sufrió importantes renovaciones en los siglos V y VI. Hacia finales del 1100, comenzó la construcción de la catedral, que finalmente se completó en el año 1230.

Fue en esta catedral donde Juan Calvino asumió el rol de pastor. Su llegada se produjo en el año 1541, tras su exilio a Estrasburgo (en Francia), y permaneció en la Catedral de St. Pierre hasta su muerte en 1564. Durante su tiempo en esta catedral, Calvino predicó numerosos sermones cada semana. También se entonaron algunas de las más bellas músicas eclesiásticas que jamás se hayan cantado. Calvino solo cantaba salmos, y creía que no debía haber instrumentos musicales en la iglesia, pero sí le gustaba el instrumento de la voz humana. Calvino hizo venir a músicos profesionales a la catedral para que entrenaran a la congregación a cómo cantar a varias voces. Así que, la experiencia de escuchar esta hermosa música, seguida por los sermones de Juan Calvino, debió haber hecho de esta una tremenda iglesia.

El púlpito desde el que predicaba Calvino sigue allí, en la cima de una escalera empotrada en la pared. También se conserva la silla en la que se sentaba mientras esperaba antes de predicar.

Después de predicar, Calvino terminaba con una oración. A menudo usaba una en particular que había escrito. Es una oración extensa, y la tituló simplemente «Oración después del sermón». El siguiente es un extracto:

Oramos también, Padre y Salvador verdadero, por todos los que has ordenado como pastores de Tu pueblo, que tienen encomendado el cuidado de las almas y la administración de Tu santo evangelio. Guíalos y dirígelos por Tu Santo Espíritu para que sean hallados fieles y verdaderos ministros de Tu gloria, esforzándose siempre por reunir y llevar a casa a las ovejas descarriadas y extraviadas al Señor Jesucristo, nuestro Pastor y Obispo principal, para que prosperen diariamente y crezcan en Él en toda justicia y santidad. Concédeles, además, que todas las iglesias sean libradas de las bocas de los lobos rapaces y de los asalariados, que siguen sus propios propósitos y ambiciones y no se preocupan por el honor de Tu santo nombre ni por el bienestar de Tu rebaño.

Calvino oró por los ministros de Ginebra, para que fueran pastores fieles, pastores bajo el gran Pastor, Cristo Jesús, al guiar a sus rebaños. Calvino estaba también muy consciente de que en muchos púlpitos no había pastores, sino lobos rapaces que, con sus falsas enseñanzas, descarriaban a sus rebaños. Calvino oró para que no fuera así en su iglesia de Ginebra. Quiera el Señor que tampoco sea así en nuestras iglesias en el día de hoy.

Soy Steve Nichols. Gracias por acompañarnos en 5 Minutos en la Historia de la Iglesia.Para más información, o para escuchar otros episodios, por favor visita 5MinutosenlaHistoriadelaIglesia.com.

Esta es una adaptación al español de St. Pierre’s Cathedral.